15.000 kg de residuos extraídos de las redes de saneamiento del municipio en más de 1200 horas de trabajo
15.000 kg de residuos extraídos de las redes de saneamiento del municipio en más de 1200 horas de trabajo
El Ayuntamiento de Güímar, en colaboración con Aqualia —empresa responsable de la gestión integral del agua en el municipio— ha llevado a cabo la limpieza de más de 200 pozos entre enero y agosto. Estas tareas se intensifican especialmente en esta época del año, como parte de la preparación ante el incremento de población que se produce durante el verano, con el objetivo de minimizar las incidencias que puedan afectar a los usuarios.
Desde comienzos de año, Aqualia ha retirado más de 15.000 kg de residuos de las alcantarillas y colectores de saneamiento de la ciudad. Para ello, su equipo ha dedicado más de 1.200 horas de trabajo. Además, se han limpiado los 71 km de red de saneamiento existentes en el municipio, incluyendo intervenciones repetidas en los denominados “puntos negros”, zonas especialmente propensas a acumulaciones o bloqueos.
En Güímar, los trabajos de desatasco realizados desde enero han supuesto un coste aproximado de 40.000€ para el Servicio Municipal de Aguas. Aqualia ha realizado 20 desatascos de casos de taponamiento en la red general de saneamiento de la ciudad, 7 de acometidas, más los pozos indicados anteriormente.
El objetivo principal de estos trabajos es garantizar el correcto funcionamiento de las rejillas y conducciones de aguas residuales, facilitando su evacuación hacia las estaciones de bombeo y depuración. Para ello, se realiza una limpieza manual de la red mediante vehículos especializados de limpieza industrial. Los residuos extraídos son recogidos por el equipo de Aqualia y trasladados a un vertedero autorizado. Como paso final, se aplica agua a presión en los pozos para verificar que no persisten obstrucciones.
“Es fundamental que todos tomemos conciencia y evitemos utilizar el inodoro como si fuera una papelera”, ha subrayado la alcaldesa de Güímar, Carmen Luisa Castro Dorta, quien, junto a Moisés García y Juan Díaz, jefe de producción y servicio respectivamente, han visitado personalmente las labores de limpieza en la E.T.A.R. Los Tarajales, destacando la importancia de estas actuaciones para preservar el buen estado de la ciudad.
🚫 Las toallitas: el principal enemigo de la red de saneamiento
Uno de los principales problemas que se detectan durante las labores de limpieza de la red de saneamiento es la acumulación de toallitas húmedas arrojadas al inodoro. Aunque algunos envases indican que son “desechables”, estas no se descomponen en el agua y forman grandes marañas de fibras que, al mezclarse con restos de jabón, se solidifican y bloquean las tuberías, impidiendo el correcto flujo de las aguas residuales.
Este no es un problema local, sino global. En España, la Asociación Española de Abastecimiento de Aguas (AEAS, actualmente DAQUAS) estima que el mal uso de las toallitas incrementa entre 4 y 6 euros por persona al año los costes de mantenimiento, tratamiento y depuración. A nivel europeo, la asociación EurEau calcula que el impacto económico de estos residuos asciende a entre 500 y 1.000 millones de euros anuales.
Desde el Ayuntamiento y Aqualia se hace un llamamiento a la ciudadanía para que no utilice el inodoro como una papelera. La colaboración ciudadana es esencial para garantizar el buen funcionamiento de la red y avanzar hacia una gestión más eficiente y sostenible del agua.
El gerente de Aqualia ha insistido en “la regla de las 3 Ps” que debemos seguir todos en casa: al inodoro solo se puede tirar pipí, popó y papel higiénico. Cualquier otro elemento puede obstruir las tuberías de saneamiento, especialmente cuando hablamos de las toallitas húmedas.
Los trabajos de limpieza en el sistema de saneamiento son cruciales para que las alcantarillas y las tuberías puedan drenar el agua residual adecuadamente. En el Municipio de Güímar, el equipo de Aqualia trabaja de forma constante e insistente en el día a día para conseguir el objetivo fijado y con ello lograr que las tuberías existentes recuperen su capacidad para que el agua residual y de lluvia (donde existen redes unitarias), fluya y llegue a las depuradoras generando las menores incidencias posibles.
Sin embargo, el Ayuntamiento y Aqualia aclaran que, si llueve de manera intensa, es casi imposible que las tuberías de cualquier ciudad puedan manejar toda el agua de inmediato, hay que recalcar que en muchas zonas del municipio las redes son unitarias y por tanto el agua procedente de las lluvias se incorpora a las tuberías de saneamiento, generando en muchas ocasiones el colapso de estas.